Juan Antonio de Zamacola: su vida, obra y concepción estético musical

La tesis trata de rescatar a este polígrafo vasco de finales del siglo XVIII y principios del XIX, estimado por algunos autores como el primer folklorista español. Este vizcaíno de Dima (1758-1826), se ha visto siempre condenado a un severo ostracismo literario, siendo muy escasa la publicación de sus obras o artículos sobre su obra o persona. Su figura en un principio se nos aparece como contradictoria. Zamacola, epítome del hombre ilustrado, trata de luchar contra los avances del iluminismo y defender la rancia tradición en todos los aspectos de la vida nacional (española). Su proteico talante nos ha dejado obras opuestas en tono pero no en genio como podrían ser el festivo Libro de moda o Historia de los currutacos, pirracas y madamitas del nuevo cuño, escrito por un filósofo currutaco y aumentada nuevamente por un señorito pirracas, el riguroso Práctico de los Tribunales o la exaltada Historia de las Naciones Bascas.

Zamacola, no había sido objeto de estudio exhaustivo con anterioridad. Esto, además de su atractiva biografía, suscita vivo interés por conocer en mayor profundidad su azarosa vida y maltrecha obra, lo que provoca la elaboración de la tesis aquí resumida.

La tesis se articula en cuatro partes bien diferenciadas. En su inicio, desvela los acontecimientos más destacables de su aciaga vida. Ésta a menudo se ha visto confundida con la de su hermano Simón Bernardo, diputado general de Vizcaya, y epónimo protagonista del alzamiento bilbaíno conocido como la Zamacolada. La metodología de esta sección se ha basado en la recolección de los exiguos documentos y fuentes primarias. Un infructuoso rastreo aboca a la decepcionante conclusión de tener que asumir como válidas las reseñas biográficas (solo, desde nuestro punto de vista, las más rigurosas) aportadas por los pocos articulistas que a su figura se han acercado. De ellas se ha podido aseverar las fechas naturales de su nacimiento y defunción, pues por sucesivas conflagraciones la documentación original pertinente se ha perdido.

En la segunda parte se elabora una contextualización y análisis de su obra literaria en la que se perfila a nuestro autor como festivo escritor costumbrista. En ella se analizan sus obras Historia de los currutacos ..., y Elementos de la ciencia contradanzaria que aportan una verdadera pintura de la vida social del momento, con una sutil descripción y crítica implícita de los imperantes además de estragados valores extranjeros. Su eje temático lo constituyen esa subespecie ontológica que él denomina currutacos, pirracas y madamitas del nuevo cuño, siempre pendientes de los usos y modas extranjeros, que no dejan de ser estrafalarias e intrascendentes.

A continuación se estudia la obra que muchos autores coinciden en considerar como máxima aportación de Zamacola, su Colección de las mejores coplas de seguidillas, tiranas y polos para ser tocadas por la guitarra, entregada en dos tomos, y elevada a la denominación de primigenio y más representativo corpus del folklore nacional (español). A la par que su antológica selección de las mejores coplas de seguidillas, tiranas y polos, la Colección pioneramente provee una exposición general sobre los tipos de canciones populares más ejecutadas en la península durante el siglo XVIII, una cuidadosa presentación de sus elementos esenciales (métrica, rima, tempus), y el análisis de su perfil estructural y caracteriológico. Por último, también en ella se esboza su concepción estética del arte tonal extraída desde una acre diatriba contra las imperantes formas musicales extranjeras que a su parecer asfixiaban cualquier tipología nacional. Despunta por novedosa y se puede observar en ella la apología del frágil folklore tradicional y las claves propedéuticas para su subsistencia en los viciados tiempos de modernidad.

Por último, una sección donde se interpreta, a través de lo expuesto en los prólogos introductores a la citada Colección, así como en los diversos artículos periodísticos, su personal concepción estético-musical, llevando a cabo un sondeo histórico a través de autores con los que Zamacola encuentra puntos de conexión ideológica, para luego expresar sus apreciaciones personales de talante axiológico